¿Y si no hay dinero para fittings ni palos?
Es lo que tiene la crisis, que a veces hay que plantearse seguir con el mismo material sine die...
Pues bien, ahora que Pablo ha lanzado el guante de los regalos para el Día del Padre, voy a proponeros uno muy barato y muy adecuado para tiempos de crisis: ¡un afilador de estrías!
Sí, es una herramienta que acaba de salir al mercado y que puede ser manejada por cualquiera. Con eso, ni fittings, ni palos nuevos, ni ná de ná, que hay que ahorrar :-)
Los palos se desgastan con el impacto de la bola y las incrustaciones de piedra o hierba, reduciendo así la mordida del palo a la bola, y por consiguiente perdiendo el spin y el control sobre la misma.
El mantenimiento de los palos de golf mediante esta herramienta constituye una auténtica alternativa a la compra de nuevos palos una vez estos estén desgastados, minimizando el gasto.
Así que, ya sabéis: hay que agudizar el ingenio.
Es lo que tiene la crisis, que a veces hay que plantearse seguir con el mismo material sine die...
Pues bien, ahora que Pablo ha lanzado el guante de los regalos para el Día del Padre, voy a proponeros uno muy barato y muy adecuado para tiempos de crisis: ¡un afilador de estrías!
Sí, es una herramienta que acaba de salir al mercado y que puede ser manejada por cualquiera. Con eso, ni fittings, ni palos nuevos, ni ná de ná, que hay que ahorrar :-)
Los palos se desgastan con el impacto de la bola y las incrustaciones de piedra o hierba, reduciendo así la mordida del palo a la bola, y por consiguiente perdiendo el spin y el control sobre la misma.
El mantenimiento de los palos de golf mediante esta herramienta constituye una auténtica alternativa a la compra de nuevos palos una vez estos estén desgastados, minimizando el gasto.
Así que, ya sabéis: hay que agudizar el ingenio.
