itting, ¿sí o no?
Siempre he pensado en eso del fitting, de hacerse unos palos a medida... ¿es buena idea? ¿sirve realmente? La verdad es que la mayoría de los jugadores amateurs eligen sus palos por la apariencia, lo que le comentan los amigos o lo que se ve en los medios de golf o en las web.
Hace unos días he tenido la oportunidad de jugar en Mallorca. He estado tres días en el hotel Son Vida y he jugado en dos de los tres campos que el grupo Arabella (propietaria del Son Vida) tiene en Mallorca. He de decir que los campos me han gustado, aunque tengan sus peros (no todos los campos pueden ser Valderrama) y he de decir que he jugado bien… A lo mejor ha sido el buen tiempo, o a lo mejor la motivación de jugar un match contra un grupo de alemanes, todo ello patrocinado por Air Berlín, que tiene tomado el aeropuerto de Mallorca.
He tenido la suerte de que me expliquen cómo funciona un fitting, en el campo de Son Muntaner, Mallorca, donde Nike tiene instalado su laboratorio de fitting junto a la tienda del club, toda ella de la marca americana.
La verdad es que me ha dejado sorprendido, porque no pensaba yo que un fitting pudiera cambiar tan radicalmente un juego de palos para una determinada persona. La longitud del palo, el grip, la varilla, la cara del palo y el lie, y todo ello bien combinado hacen que una persona pueda elegir entre 60 juegos de palos distintos en un espacio de unos pocos metros.
Entre esos 60 juegos de palos, cada uno tendrá que ver cual es el grosor de grip que necesita, en función de la palma de su mano; la longitud de la varilla, en función de su altura; la dureza de la varilla, en función de la velocidad de swing (medida con un aparato electrónico); el lie del palo (ángulo de la cara del palo respecto al suelo), en función de la verticalidad del swing… En definitiva, son muchos los factores que se deben tener en cuenta a la hora de escoger los palos nuevos.
En Son Muntaner te cobran 75 euros por el fitting, que se te descuentan si al final compras los palos. Por ese precio podemos tener unos palos casi, casi, tan a medida como los que tiene Tiger Woods.